2 "Diré a Dios: No me condenes, hazme entender por qué pleiteas conmigo.
3 "¿Te parece bien que oprimas, que deseches la obra de tus manos, y favorezcas, el designio de los impíos?
4 "¿Tienes tú ojos de carne? ¿Ves tú como ve el hombre?
5 "¿Son tus días como los días del hombre, o tus años como los tiempos humanos,
6 "para que inquieras mi iniquidad, y busques mi pecado?
7 "Tú sabes que no soy impío, y que no hay quien me libre de tu mano.
8 "Tus manos me formaron y me hicieron. ¿Te volverás ahora para deshacerme?
9 "Acuérdate que como a lodo me diste forma. ¿Y ahora quieres reducirme a polvo?
10 "¿No me fundiste como leche, y me cuajaste como al queso?
11 "Me vestiste de piel y carne, me tejiste de huesos y nervios.
12 "Vida y bondad me concediste, y tu providencia guardó mi espíritu.
13 "Sin embargo, esto guardabas en tu corazón, ahora sé que esto pensabas.
14 "Si pequé, tú me has observado, y no me tendrás por limpio de iniquidad.
15 "Si fuera culpable, ¡ay de mi! Y aunque fuera inocente, no levantaré mi cabeza, pues estoy harto de vergüenza, y ahogado en mi aflicción.
16 "Si levantara mi cabeza, me cazarías como a león, y de nuevo mostrarías tu pavoroso poder en mí.
17 "Traes nuevos testigos en mi contra, y aumentas tu enojo hacia mí. Y tus fuerzas me atacan, oleada tras oleada.
18 "¿Por qué me sacaste del seno? Hubiera yo expirado y ningún ojo me hubiese visto.
19 "Habría sido como si nunca hubiera existido, llevado desde el vientre a la sepultura.
20 "¿No son pocos mis días? Cesa, pues, y déjame, para que tenga algún alivio,
21 "Antes que vaya para no volver, a la tierra tenebrosa, de profunda sombra,
22 "tierra oscura, lóbrega, de negrura y desorden, donde la misma luz es tenebrosa".