2 Entonces Salomón envió a decir a Hiram:
3 "Tú sabes que mi padre David no pudo edificar casa al Nombre del Eterno su Dios, por las guerras que lo cercaron, hasta que el Señor puso a sus enemigos bajo la planta de sus pies.
4 "Ahora el Eterno mi Dios me ha dado paz por todas partes, y no hay adversarios, ni mal que temer.
5 "Por tanto, he determinado edificar casa al Nombre del Eterno mi Dios, como él lo dijo a David mi padre: 'Tu hijo, que pondré en lugar tuyo en tu trono, edificará casa a mi Nombre'.
6 "Manda, pues, que me corten cedros del Líbano. Mis siervos estarán con los tuyos, y yo te daré por tus siervos el salario que tú digas. Porque tú sabes bien que ninguno hay entre nosotros que sepa labrar la madera como los sidonios".
7 Cuando Hiram oyó las palabras de Salomón, se alegró en gran manera, y dijo: "Bendito sea hoy el Eterno, que dio hijo sabio a David sobre este pueblo tan grande".
8 Hiram respondió a Salomón: "He oído lo que me mandaste decir. Haré todo lo que te plazca acerca de la madera de cedro y de ciprés.
9 "Mis siervos la llevarán desde el Líbano al mar. La enviaré en balsas hasta el lugar que tú señales. Allí se desatará, y tú la llevarás, y cumplirás mi deseo de proveer el alimento para mi palacio".
10 Hiram, pues, envió a Salomón toda la madera de cedro y ciprés, que él quiso.
11 Y Salomón daba a Hiram 20.000 coros de trigo (4.400.000 lts) para el sustento de su familia, y veinte coros de aceite limpio (4.400 lts). Esto daba Salomón a Hiram cada año.
12 El Eterno dio a Salomón sabiduría como le había dicho. Y hubo paz entre Hiram y Salomón, e hicieron alianza entre ambos.
13 El rey Salomón reclutó 30.000 obreros por todo Israel.
14 Enviaba al Líbano diez mil cada mes por turno. Un mes estaban en el Líbano y dos meses en sus casas. Y Adoniram estaba a cargo de la leva.
15 Salomón también tenía 70.000 cargadores, y 80.000 cortadores en el monte.
16 Sin contar los principales oficiales de Salomón que estaban sobre la obra, 3.300 encargados del pueblo que hacía la obra.
17 Y el rey mandó que trajesen grandes piedras, piedras costosas, para los cimientos de la casa, y piedras labradas.
18 Los albañiles de Salomón, de Hiram y de Gebal cortaron y aparejaron la madera y la cantería para la casa.